Carmen Gloria Mazry

Monumento conmemorativo
1998
Escultura. Módulos de madera aglomerada lacada,
dos de 30 x 60 x 210 cm; cuatro de 60 x 60 x 60 cm; cuatro de 60 x 60 x 120 cm; dos de 60 x 134 x 120 x 60 cm

La obra fue cedida en comodato por la artista en el contexto de la exposición colectiva Sala Elefante (con Josefina Fontecilla y Elisa Aguirre), realizada en Galería Gabriela Mistral desde el 6 al 30 de enero de 1998. Ingresó al Estado en abril del 2002.

Las esculturas de Kika Mazry son monumentos que no monumentalizan nada, juguetes con los que no se puede jugar. Tienen una función no tanto plástica como discursiva: están hechas para poner en funcionamiento una discusión, para ratificar un diagnóstico sobre el estado actual de las simbolizaciones urbanas. Su juego, si lo hubiere, consiste en poner de relieve un desfase entre el sentido originario de la representación escultórica representación mística, según anota la autora en su proyecto para una exposición anterior y la función actual del monumento público: la de ornamentación cultural vinculada a las estrategias de poder.

ROBERTO MERINO